viernes, 20 de noviembre de 2009

Brancaleone con vida y lucha


EL guitarrista de la banda, Marcelo “Chelo” Henin, le contó a BALDOSAS FLOJAS cómo es el flamante disco en vivo y la forma que tiene Brancaleone de encarar el arte en todo su concepto.


En los tiempos modernos todo sucede a una velocidad asombrosa, es como si detenerse a pensar resultaría demasiado costoso. La incitación a acostumbrarse y acomodarse a lo que muestran los medios está presente todo el tiempo. El avance de la tecnología alcanzó incluso a aquellos que alguna vez alzaron la bandera del cambio, de la no sumisión, de ir a buscar otros caminos...

Ver a Brancaleone en un escenario refleja la idea menos atendida, esa que alude a que todavía se puede soñar y que nunca hay que bajar los brazos. La lucha por un mundo mejor sigue, pero no solamente desde la aburrida critica, sino además desde la alegría como elemento fundante de la vida.

Después del excelente disco de estudio titulado Imposible (2008), con un arte de tapa que entrelaza las letras de los temas con dibujos de no videntes (integrantes de la Asociación de Pintores Independientes), ahora Brancaleone va por más y saca a la luz su disco en vivo Convida (2009). Allí se refleja la energía de la banda en vivo, pero, sobre todas las cosas, el carisma que tienen arriba del escenario pero sin inmutar ese rasgo distintivo de pocos: la humildad.

“Sabemos que en un recital la gente nos transmite mucho. Si bien es reciproco, esa energía nos lleva a lugares impensados, de ahí salió la idea del disco y se ve relejado el recital que hicimos el 27 de diciembre del año pasado (2008) en 9 de Julio”, explica el guitarrista Marcelo “Chelo” Henín respecto al disco en vivo

¿Cómo se sienten ahora que el disco en la calle?

Nosotros decimos que este disco no es de Branca, es de todos, porque lo pudimos hacer gracias a todos: la gente cantando los temas sintiéndolos abajo.

La verdad es que queríamos que quede reflejado eso que se siente en un recital, tanto para la gente como para nosotros.

¿Tener un muy buen arte de tapa sirve para evitar la piratería?

Internet es buenísima por la llegada, ayuda a que se puedan conocer muchas bandas y temas, aunque a mí, cuando me gusta un disco, voy y me lo compro porque me gusta tenerlo, porque un disco no solamente son temas de música, es arte. Por eso la tapa es especial, es parte del disco, muestra quiénes lo hicieron, cómo y por qué. Ahora que nosotros lo vemos de este lado, intentamos hacer algo distinto y sentido.

Todos las personas viven con un luchador adentro: algunos lo reprimen, otros intentan mostrarlo de manera frontal y terminan golpeados con la realidad. En el show, un guerrero contó la historia que lo ayudo a buscar su camino, como la de tantos otros…

“Veníamos de asistir a mil y un naufragios de sueños, de paladear la derrota mucho antes de comenzar la pelea y de no tener otra mirada que la de ése par de ojos resignados. Entonces empezó a hacer ruido, algo se retorcía y rascaba las paredes del corazón del animal dormido. ¿Qué carajo vas a hacer con tu vida? ¿Quién creés que tiene el poder de cambiar lo que está mal? Y justo ahí nos despertamos y empezamos a buscar y nos encontramos con Brancaleone, nuestra banda de rock, nuestro gatillo. El Negro José toca la bata, Juan la viola, Alejo el bajo, Martin canta, Edu el teclado, Pedro arma los paquetes y detrás de la banda hay una Armada de gente que ya se cansó de esperar. Si clausuran, tocamos en la calle. Si nos encierran, tiramos la pared abajo. Si ponen reglas idiotas, tocamos ilegal. Si nos lastiman y nos duele, ya no sólo vamos a gritar”, se escucha no tan resignada ni sumisa, se escucha, esa voz, desde algún rincón, la poesía como base de luz finita que con el tiempo toma forma...

Brancaleone está con vida. Nunca se rinde. Brancaleone convida aunque no le sobre nada. Quieren compartir con los demás esas sensaciones y canciones guardadas. Ahí están, van por el cielo. Menudo objetivo.

lunes, 2 de noviembre de 2009




El Cantante y guitarrista de Anima Triple, Juan Huertas, habló con BALDOSAS FLOJAS antes de su recital en La Trastienda donde presentarán su disco “Y qué si ya no podemos detenerlo?”


El nombre salió de un diccionario de Filosofía. Gustó enseguida Alma Triple, pero pronto decidieron cambiarlo por la similitud con Alma Fuerte. Por esas cosas del destino quedó Anima Triple. Desde Olivos viene la movida, con la excusa de algún atardecer de 2004. Cinco años a cuestas parece poco, pero para los tiempos que exige el under es todo un cometido. Un EP y dos discos, el más reciente “Y qué si ya no podemos detenerlo?” tiene una apuesta muy fuerte y la participación de Hernan Langer(Carajo).

Sobre la propuesta del disco, el cantante de la banda Juan Huertas, explica:
“Este disco es más personal y más crudo con relación al anterior Nuberockinstante (2007). Nos propusimos no tardar tanto tiempo en la grabación y en la salida del disco. No queríamos que se nos pasara el 2009 sin poder sacarlo así que en marzo de este año empezamos a componer y en mayo, junio ya estábamos empezando a grabar. Fue todo muy vertiginoso, fue mucho trabajo en muy poco tiempo y tuvo como esa cuota de adrenalina”

¿Cómo resultó eso de grabar en ese relativo corto tiempo?
Si, la verdad que sí y le tenemos que agradecer a Santiago Beer, que fue nuestro productor. Ya nos había grabado en nuestro disco anterior. La verdad es que es un tipo muy talentoso, nos veíamos todos los días, trabajamos durísimo y la verdad es que nos ayudó mucho. Nos ayudó a ordenar el trabajo porque para cerrar un disco uno tiene que estar atento a muchas cosas, a componer, en la presentación, en el arte, hay muchos factores y si no tenés todo más o menos resuelto, se vuelve un poco caótico.

¿El disco salió como realmente ustedes querían? ¿Cuán difícil fue la selección de los temas?
El disco es muy variado, tiene un rock más clásico, más cercano a los setenta, tiene temas más bailables, otros más pesados, tiene acústicos. No nos reprimimos mucho a la hora de elegir los temas que van a estar en el disco, me pareció que era valioso. Me parece que los discos conceptuales, que seguían una línea, en parte, están desapareciendo. Nosotros vamos trabajando tema por tema para dejarlos lo más natural posible.
Además de Juan Huertas, la banda la completan Mariano Fandiño en bajo y los hermanos Mauro (guitarra y coros) y Guido (batería) Fernández Badi. Anima Triple compartió escenarios con Smitten y Carajo. Del disco participó justamente el guitarrista de ésta última banda, Hernán “Tery” Langer, además de Javier Weintraub, colaborador constante de Catupecu Machu en lo que a cuerdas se refiere.
Su música se fusiona y coordina entre el nu metal y el rock alternativo, aunque con algunas licencias, como aclara Juan Huertas, que giran en este disco a la banda hacia un perfil más cercano a la década del setenta, , “es decir, si había dos violas, dejar las dos violas, tratar de que la estructura del tema fuera más crudo. Tratamos de evitar sobrecargar las cosas”

¿Y en cuanto a la composición de las letras ?

Con relación a las letras, son muy variadas, hay temas que hablan del mundo del rock y lo que es el camino para llegar a ser una banda, para trabajar dentro de la música como es Permiso. Hay temas de amor, hay temas sumamente reflexivos, hay un tema sobre Buenos Aires, hay una versión de Seminare que nos va a dar muchos frutos porque es un tema muy diferente a la versión original y hay de todo.
Trabajé bastante en que fueran originales y directas. En el disco anterior quizás eran un poco más herméticas en lo que respecta a la poesía. Busqué conjugar la poesía con la vida cotidiana

¿Qué respuestas encontraste en ese aspecto?
A mi me gusta que aquel que escuche el tema, me devuelva una versión nueva. Me gusta que las letras puedan tener diferentes sentidos y que venga alguien y diga: “Que bueno este tema, a mí me pasó lo mismo con mi novia” y por ahí yo estaba escribiendo sobre una historia mía, muy personal. Me parece que eso es valioso, completa a la banda y hace que el público haga suya a la banda...
Anima Triple carga sobre sus espaldas el peso y la fortaleza de sus cinco años y la realidad conjugada de sus discos. Dando la sensación que ya nadie podrá detenerlos.