Anahí Ferreyra es escritora, tiene varios
libros editados y además da talleres de escritura, en charla con Baldosas
Flojas nos contó cómo arrancó a escribir, sus motivaciones y para que sirve el
arte.
Estudió letras, hasta que el 19 de diciembre del 2001 sintió que su destino cambiaba irremediablemente, y decidió que era tiempo de hacer. Participó de la asamblea bohemia de Colegiales, el Sexto Kultural (donde dio un taller literario junto Martín Schenkmann) y ahora de la Aldea Permacultural Velatropa y la pandilla de escritores ambulantes Cóctel Molotov. Trabajó en la editorial independiente )el asunto( y en fm radiolibre. Toca la guitarra, dibuja y experimenta con distintas técnicas gráficas. Ella es Anahi Ferreyra que también es organizadora de la FLIA (feria del libro independiente) desde sus principios, viajó un año por sudamérica. Escribió mucho, editó los fanzines elegantes o libros de pocas hojas, Amor Esa Palabrita, Summersión, Separación 04, Contagios y Reservas y las novelas Máscara y Vacío (biografia ficticia de Syd Barrett) y Las Alturas, que vende en ferias, plazas, bares. A veces usa sombrero y a veces no. En charla con Baldosas Flojas, a pesar de su resfrío, nos contó las motivaciones que tuvo al escribir, que da en los talleres que brinda y si el arte puede generar consciencia.
¿Cómo
llegaste a la literatura y cuales fueron tus motivaciones?
Fui leyendo literatura de aventura desde muy
chica, como las aventuras de Tom Saywer, La guerra de los botones, eso cuando
era una niña de entre 8 y 9 años, ya mas grande alrededor de los 12 ,13 años
empecé con Cortazar, Roberto Art, Sartre, fui pasando por distintas épocas,
pero lo que me motivo escribir es esa posibilidad de irte a otros mundos con la
literatura
¿Qué
sentís al escribir?
La escritura tiene varios momentos, los
catárticos, los vertiginosos que son los placentero, es cuando estas inspirado
y sentís conexión con el texto, después esta la etapa de potenciar lo que
escribiste, otro momento es el de corrección que es muy tedioso y cuando estas
por el lado de la narrativa ó la novela
hay una parte que no te cierra, un
personaje o un hecho y ahí está el
artista candente, pensar las opciones, aparece el tachar, escribir y eliminar
lo que escribiste, trabarte con una palabra con una escena, esa etapa no es tan
placentera, pero es muy necesaria.
¿Se
piensa en el lector a la hora de escribir y lo que se puede generar?
Cuando ya editaste y te leyeron si, pero a la
hora de escribir no, yo trato de que se entienda lo que quiero expresar y no
otra cosa, por eso digo que la escritura tiene distintos momentos, antes de ser
publicada la obra hay que volver a leerla para que no haya malos entendidos,
que no queres que ocurra, si bien no todos los lectores entienden lo mismos,
hay opiniones diversas, pero hay cosas que no queres que se entiendan en
otro sentido.
¿Adónde
apunta el taller de escritura que das?
Si bien estamos por arrancar, la idea del
taller es trabajar con lo que la gente traiga, buscar el interés de la
personas, a veces se quiere forzar una escritura por que nos gusta un autor y queremos
escribir como él, pero cada uno tiene su forma o esencia, se puede copiar
algunas cosas pero no escribir como él, se trata de ser natural y potenciar lo
que cada uno tiene.Además de corregir las dificultades de cada uno, como los
tiempos verbales o lo que sea, en verdad se trata de potencial y descubrir lo rico de cada uno.
¿Se
puede generar consciencia a través del arte?
Si
yo creo que si, trato que si, creo que el arte te ayuda a despertar algo o
terminar de poner en palabras pensamientos, pero no puede quedar solo ahí, hay
que hacer más cosas para conseguir los cambios, organizarse, debatir, si bien
creo que el arte sirve y ayuda un monto para generar consciencia y eso es lo
que me interesa personalmente
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